Los espacios reducidos pueden llegar a parecer un reto extra a la hora de decorar, pero realmente no son así. Solo hay que saber aprovechar bien cada metro cuadrado, cada una de las esquinas de la habitación o de la vivienda, saber unificar y dar profundidad con ayuda de elementos tales como el color y la luz.
Precisamente, nuestro último proyecto ha consistido en el diseño de un pequeño estudio en Estepona (Málaga) y hemos logrado ganar metros, sin mover ni un solo ladrillo. Además, ha sido un proyecto completamente low cost. Y es que lo más caro, no es sinónimo de buen gusto y de calidad. En el diseño de interiores lo más importante es saber jugar con el espacio, las formas y las tonalidades.
En el caso de este apartamento distribuido en una sola habitación, un cuarto de baño, un vestidor y una cocina abierta al salón, hemos utilizado colores claros para lograr abrir el espacio y que se vea más luminoso y más amplio. Igualmente, debemos crear espacios despejados, sin objetos ni muebles de más. Es primordial tener lo justo y lo necesario.
Este apartamento cuenta con luz natural en la mayoría de las habitaciones y es una pieza a nuestro favor. Sin embargo, en el caso de que la habitación no tenga una ventana, se pueden colocar espejos que ayudan a proyectar la luz a otros rincones. Además, de proporcionar mayor profundidad al lugar.
Por otro lado, hay que destacar la decoración de las paredes con papel pintado. El diseño de las paredes puede cambiar por completo el carácter de nuestro hogar. Junto al papel, hemos introducido la madera de los muebles y del suelo, así como la cocina lacada en brillo con el objetivo de romper la sintonía de los materiales.
Todo el mobiliario sigue una línea contemporánea, acogedora y al alcance de todos. Los muebles están diseñados por nuestro estudio con melaminas en efecto madera.
